Siguiendo con la nueva sección de accesorios para Stadia, hoy os traigo este análisis del mando Razer Kishi en su uso para Stadia, el mando que promete revolucionar la forma en la que jugar con nuestro dispositivo móvil, ¿lo conseguirá? Arrancamos.
Razer revoluciona nuevamente el mercado de los dispositivos gaming con un mando capaz de acoplarse a nuestro móvil, para acercar lo máximo posible la experiencia de juego en consola a casi cualquier teléfono móvil. Únicamente nos podremos ver limitados a no poder utilizar el Razer Kishi en nuestro móvil si no disponemos de conector USB de tipo C en el centro del marco lateral del mismo, o si tenemos un móvil extremadamente grande. Existen tres variables del Razer Kishi, uno genérico para dispositivos Android, otro con el acabado de la botonera personalizado con el esquema de los controladores de Xbox y una tercera versión para dispositivos con iOS de Apple.
La unidad que vamos a analizar en este articulo es la versión genérica de Android, la cual según la web de Razer, únicamente será compatible con Android 8.0 Oreo o posterior y con móviles de un tamaño máximo de 145,3 – 163,7 mm x 68,2 – 78,1 mm x 7,0 – 8,8 mm.
El Razer Kishi viene presentado en una pequeña caja marca de la casa que ya refleja que estamos en frente de un accesorio premium, y no es para menos, teniendo en cuenta que el Razer Kishi está a la venta ahora mismo en Amazon por un precio desde 89,99€.
La caja cuenta con los colores corporativos de Razer donde predominan el verde y el negro. Cuenta con un acabado en mate en el que resalta en el medio la imagen con brillo reflectante del Razer Kishi acoplado a un móvil en plena acción. Dentro de la caja encontraremos nuestra unidad del Kishi plegado y debidamente precintado. El empaquetado es simplemente perfecto y cuenta en la misma tapa de la caja con unas almohadillas para impedir que el mando se mueva o pueda sufrir cualquier desperfecto dentro de la misma caja.
Fuera de la caja y con el Razer Kishi ya en nuestras manos, nos encontramos con un accesorio que destaca por su poco peso y su tamaño relativamente compacto. El Razer Kishi pesa alrededor de los 159 gramos y plegado tiene unas dimensiones aproximadas de unos 13cm de ancho por 9cm de alto, con un grosor de 2,5cm aproximadamente.
Al tacto, las primeras impresiones con el Razer Kishi es que cuenta con un acabado en plástico de una calidad intermedia, no es un plástico que palpemos como endeble pero tampoco es el acabado premium que cabria esperar, en parte por el poco peso del dispositivo, si bien, no quiero adelantaros nada, pero esta percepción cambia radicalmente con un móvil acoplado al mando.
Siguiendo con las demás partes del Kishi, nos encontramos con una distribución de los sticks analógicos del mando similar a la que veríamos en un controlador de Xbox. El stick izquierdo está ubicado en la parte superior más hacia la parte exterior, mientras que el stick derecho se encuentra un poco más abajo de lo que sería el centro del agarre de la mano derecha. El Razer Kishi monta dos sticks cóncavos con un tacto ligeramente áspero que evitará que se nos resbale el dedo a la hora de jugar. Los sticks recuerdan y mucho a los que podemos encontrarnos en los mandos de Xbox One, y eso por supuesto, es una muy buena noticia. Podríamos advertir en diferencia a estos, que los de Xbox One e incluso el mismo Stadia Controller, cuentan con un acabado rugoso en los bordes que no encontraremos en el Razer Kishi, aun así, las sensaciones son muy buenas al tacto.
La respuesta de los sticks, se nos antoja un pelín más dura que en el Stadia Controller, aunque no a un nivel que pueda preocuparnos y que pueda afectar al uso o a la experiencia de juego.
Los botones de acción, son simplemente perfectos. El tacto de estos es muy agradable y las pulsaciones no tienen nada que envidiar a las de cualquier mando actual. Como cabría esperar, cuenta con la distribución que podemos encontrar en el Stadia Controller o el mando de Xbox por si tenéis en mente utilizarlo con el servicio de Microsoft xCloud, por lo que tendremos los cuatro botones situados de forma romboide con los grafías X,Y,A y B.
La cruceta de dirección cumple sin más. Cuenta con un acabado mínimamente cóncavo que nos permite situar el pulgar con comodidad encima de la misma. El tacto es muy similar al de los botones de acción, con lo que es bastante bueno, aunque se empaña esta sensación al utilizarlo y presionar alguna de sus aristas. En ningún momento funciona incorrectamente, pero si hubiese preferido unos switches un poco mas duros, más mecánicos, que marcaran mejor la pulsación de los botones direccionales.
Para finalizar con la parte frontal, el Razer Kishi cuenta con tres pequeños botones de control, que harán a su vez del clásico «select», «start» y el botón «home». Los botones son pequeños pero funcionan perfectamente con un switch que sentiremos como lo pulsamos e incluso lo escucharemos. Y aquí viene uno de los puntos negativos del Razer Kishi para su uso con Stadia, y es que, no disponemos de los botones de interacción y captura exclusivos del mando de Stadia. No es algo que sea imprescindible, pero si es algo que tenemos que tener en cuenta a la hora de adquirir el accesorio.
Y llegamos finalmente a los botones superiores y los gatillos. En ambos caso contaremos con el grabado de la disposición que encontraremos tanto en el Stadia Controller como en el mando de Xbox One. Tenemos los botones superiores R1, L1 y los gatillos R2 y L2. Hay que tener en cuenta, que ambos pulsadores han visto reducido su tamaño respecto a los mando tradicionales por razones obvias, aunque no por ello ofrecen una mala experiencia de uso.
Los botones R1 y L1 son más estrechos de lo que estamos acostumbrados y están pegados a los gatillos, aunque de forma muy acertada se han posicionado un poco más hacia afuera respecto a estos, marcando un pequeño escaloncito que nos ayuda a distinguir unos de otros de forma muy instintiva. El tacto y el switch de los botones me han parecido prácticamente perfectos. En este caso, los botones R1 y L1 están muy bien resueltos.
El tema de los gatillos R2 y L2 es un poco más delicado y peliagudo. Obviamente, al tratarse de un dispositivo que busca la movilidad, Razer ha optado por unos gatillos mas pequeños que los que encontraríamos en el Stadia Controller por ejemplo. Es por ello que el gatillo tendrá mucho menos recorrido por lo que perderemos algo de sensibilidad en comparación a los mandos tradicionales. Para adaptar físicamente estas circunstancias, Razer ha dotado a los gatillos de una pequeña resistencia adicional que apenas percibiremos y que efectuará un sonido como de «roce» cada vez que pulsemos alguno de los gatillos. La solución funciona, y si somos capaces de darle una oportunidad al dispositivo, terminaremos por adaptarnos y hacer uso plácidamente de los gatillos, aunque vuelvo a suscribir que tendremos que pasar por una pequeña fase de adaptación.
Llega el momento de revisar uno de los puntos clave del Razer Kishi, el anclaje.
El Razer Kishi tiene un sistema de sujeción que mantiene el dispositivo plegado. Estirando de dos pestañitas situadas en la parte trasera del mismo, se abrirá el anclaje y nos permitirá separar la parte del controlador derecha e izquierda que irán sujetos con una cinta elástica. La cinta que une ambas partes es bastante ancha y viene reforzada para ofrecer una mayor durabilidad. En ningún momento da la sensación de que sea una cinta que se pueda romper o desgastar. Esta cinta, es lo que ejercerá la tensión en ambas partes de los controladores, manteniéndolos unidos al dispositivo móvil. Para ello, ambos controladores cuentan con unos surcos a modo de guía donde encajar nuestro teléfono. Estas guías están cubiertas con una goma rígida que evitará que podamos producir cualquier daño sobre los marcos del móvil o rayar la pantalla del mismo.
El controlador derecho está preparado para recibir el móvil con un conector USB de tipo C en la misma parte central de la guía. Hay que tener muy en cuenta, que si nuestro móvil no tiene conector USB-C o está situado en un lateral, no podremos hacer uso del Razer Kishi. Así mismo, tendremos que tener en cuenta que el Kishi no cuenta con batería propia y que únicamente funcionará mediante la conexión con el USB de tipo C que hemos mencionado, haciendo uso de los recursos energéticos del móvil, aunque en ese sentido, también podremos estar tranquilos pues Razer ha dotado al Kishi de un conector hembra de USB tipo C en la parte inferior del controlador derecho, el cual podremos conectar para cargar el móvil, aunque eso si, olvidaros de conectar a través del adaptador unos auriculares a ese puerto, pues no funcionarán. El puerto USB de tipo C exterior, es exclusivo para la carga del móvil.
Ahora que ya os he explicado detalladamente como es el Razer Kishi, os voy a explicar mi experiencia del dispositivo en Stadia.
Para empezar, acoplar el dispositivo al móvil es extremadamente fácil. Lo primero de todo, será retirar la funda al móvil. Olvidaros de jugar con funda en el Kishi, el perfil de las guías no admitirá el extra de grosor que añaden la mayoría de las fundas y el conector USB tampoco encajaría bien. Una vez hayamos retirado la funda de nuestro móvil, conectar el Razer Kishi será tan sencillo como acoplar la parte derecha que tiene el conector USB con el puerto de carga de la parte inferior de nuestro móvil y tiraremos del controlador derecho para encajarlo en la parte superior del móvil. La correa elástica se encargará de que el Kishi quede perfectamente acoplado a nuestro teléfono.
Una vez acoplado, el Razer Kishi se siente como una única pieza perfectamente ensamblada en la que no notaremos ninguna vibración del uso ni movimientos por parte de los controladores que se puedan producir por falta de tensión en la cinta elástica o una mala sujeción.
En mi teléfono Xiaomi que pesa alrededor de los 180 gramos, el combo con el Razer Kishi pesa entorno a los 339 gramos. Algo que, al contrario que ocurría con la garra de Orzly, resulta muy cómodo al uso debido al reparto de pesos en el agarre.
He pesado también las distintas versiones de Nintendo Switch para que podáis comparar el peso de ambas respecto al Kishi montado en un móvil. La Nintendo Switch Lite tiene un peso inferior al combo del Razer Kishi con un peso de entorno a unos 273 gramos, mientras que su versión original, la Nintendo Switch con sus 411 gramos, supera en igual medida al dispositivo de Razer.
La experiencia de juego con el Razer Kishi es sumamente satisfactoria. El reparto de pesos, permite jugar sesiones relativamente largas tal y como lo podríamos hacer con una Nintendo Switch, de echo, las sensaciones son extremadamente similares.
Si estamos acostumbrados a jugar en el Stadia Controller, al principio notaremos la disposición de los sticks analógicos algo extraña y tendremos que pasar por una pequeña fase de adaptación para encontrarle el punto a los sticks analógicos y a los gatillos, aunque en un par de horas estaremos disfrutando del que podríamos considerar como uno de los accesorios imprescindibles para Stadia.
El Razer Kishi no es ni mucho menos perfecto. Hay muchos detalles que se pueden mejorar para una segunda versión del dispositivo, que seguro habrá. Me hubiese gustado que tuviera un conector para auriculares, y es que, al encajar el Kishi en el móvil, seguramente obstruiremos el puerto minijack y los altavoces del móvil, de forma que no tendremos toda la calidad del sonido que cabría esperar y limita las conexiones de audio a unos auriculares con bluetooth.
En definitiva, Razer nos pone sobre la mesa un dispositivo que nos permite finalmente disfrutar de Stadia en nuestros dispositivos móviles en cualquier parte, y nos ofrece con su Razer Kishi el que al momento de escribir estas líneas, es el mejor controlador para disfrutar de Stadia en nuestro móvil.
Ivan
Muy bueno el análisis. Coincido con el tema de los auriculares. Yo lo uso con unos Bluetooth de baja latencia, pero preferiria poder usar unos con cable
LGNZH
Buena compra entonces será.
¡Gracias por el esfuerzo y dedicación!
Josep
La verdad es que tiene buena pinta y es muy tentador. Pero el precio me tira un poco para atrás y pudiendo usar otro mando con soporte… creo que me esperaré a que haya alguna oferta interesante o simplemente baje de precio con el tiempo.
Buena revise, muy detallada.
Xuso77
Muy buen análisis. Ya lo probaré….
MoidooM#6660
Gran análisis!! Lo pillaré en alguna rebaja por qué me parece algo elevado el precio.
Israel
Tengo un Xiaomi mi 11. Por las medidas que tiene este móvil no se si será compatible con este mando. Podríais orientarme? Gracias. Una REVIEW muy buena!