Savathûn, La Reina Bruja amenaza con romper el equilibrio en La Luz en esta sexta expansión de Destiny 2. Ha llegado la hora Guardianes. El universo requiere de nuestra habilidad y destreza una vez más. Prepararos para este nueva aventura en nuestro análisis de Destiny 2: La Reina Bruja para Stadia.
Antecedentes e historia
Que os podemos contar de Destiny 2 que no sepáis ya a estas alturas. Podría empezar diciendo que Destiny fue engendrado por Bungie, los creadores de la famosa franquicia de Halo. Podría extenderme mucho más nombrando la cantidad de expansiones que cuenta en su haber la primera entrega y esta segunda entrega que vio La Luz (nunca mejor dicho), allá por el año 2017. O simplemente añadir, como el mismo juego Destiny 2 fue uno de los juegos que se lanzó paralelamente junto con la plataforma de Stadia el 19 de noviembre de 2019.
Con todo esto, Destiny 2 sigue más vivo que nunca y no ha parado de recibir expansiones con mucho más contenido y distintas mejoras que han hecho del juego en Stadia, un juego completamente distinto al que vimos en 2019 en la plataforma… y para bien. Pero en esto nos adentraremos en los siguientes párrafos dedicados al apartado tecnológico.
Lo que aquí nos atañe ahora, es la historia de La Reina Bruja, un DLC que incluye una nueva campaña para Destiny 2 y que le da una nueva dimensión a la obra de Bungie. La Reina Bruja nos da de nuevo una excusa para visitar el juego de Bungie una vez más, y aunque su guión no es de los más originales, si nos será los suficiente interesante para seguirlo a lo largo de toda la campaña.
Savathûn, la reina del engaño, La Reina Bruja ha aparecido misteriosamente en Marte sin motivo aparente. Casualmente, nuestro Guardián estará por la zona en la que se ha avistado la nave nodriza de Savathûn, por lo que tocará investigar el porqué de esta repentina aparición…
No voy a entrar en más detalles sobre el argumento, aunque añadiré que no es necesario haber jugado a las anteriores expansiones e incluso a Destiny 2 para seguir con más o menos facilidad la misma, aunque si que es verdad, que hay continuas alusiones a personajes y momentos de otros DLCs que harán que si has jugado al título con anterioridad, tengas un retorno adicional de información en este sentido.
De igual forma, los recién llegados podrán disfrutar igualmente del juego y su expansión.
Tecnología
Mucho ha llovido desde que Destiny 2 aterrizara en nuestros hogares junto con la plataforma de streaming de juegos de Google. Con ello, el título se ha ido actualizando constantemente en Stadia y presenta a día de hoy un acabado técnico excelente y un rendimiento sobresaliente en la plataforma.
Jugar a Destiny con cualquiera de las opciones que nos brinda Stadia es una delicia. Estamos ante un juego muy consistente, con una fluidez muy rocosa, en la que el juego se muestra prácticamente a todo momento a 60 cuadros por segundo. Alguna caída de FPS o rascada presenciaremos, pero esto ocurrirá casi de forma anecdótica y no nos impedirá para nada disfrutar de un juego realmente bien optimizado para la plataforma.
Si a la gran optimización del juego le añadimos un apartado artístico soberbio, os podéis hacer una idea de lo que nos vamos a encontrar. Esta vez Destiny 2 vuelve con un estilo artístico más barroco que se entremezcla con una paleta de colores más clara, con una gama de colores «pastel» a la que no nos tiene acostumbrados pero que le sienta realmente bien al juego.
Por su parte, el apartado sonoro cuenta como es habitual en la franquicia con un doblaje excelente al español. Una música que se adapta perfectamente al juego y que le da un aire muy épico a nuestras hazañas. En este sentido, sobresaliente.
Jugabilidad
Poco podemos decir en cuanto a la jugabilidad de Destiny 2. El juego de Bungie cuenta con un gunplay exquisito y muy depurado. Puedes jugar tranquilamente con mando o con teclado y ratón que la experiencia será igualmente gratificante.
A todo esto, hay que sumarle ahora algunas mecánicas nuevas en los enemigos. En La Reina Bruja, algunos enemigos vendrán acompañados por unas extrañas polillas luminiscentes que proporcionarán un escudo adicional a los enemigos. Al derrotar a los enemigos, dichas polillas pueden alojarse en otro enemigo para proporcionarle de nuevo un escudo adicional al otro enemigo y así sucesivamente. Pero no padezcáis, podremos derrotarlas muy fácilmente durante el trance, eso si, si nos acercamos demasiado a las mismas, estas nos atacaran cual kamikaze explotando al contacto con nuestro personaje.
Si esto os pareciese poca novedad, contaremos además con enemigos portadores de La Luz con su propio espectro el cual será capaz de revivir a dichos enemigos si no nos deshacemos de él a tiempo.
Poco más que añadir en este aspecto.
La cosa cambia si profundizamos un poco más en las mecánicas que ofrece el juego. Son tantas las opciones de personalización, mejoras de armamento y armaduras, eventos, desafíos y contenido que emana «por fuera» de la campaña, que se hará bastante complicado de cara a los nuevos usuarios.
Sin duda alguna, la mejor forma de adentrarnos en el universo de Destiny 2 si no hemos jugado al título con anterioridad, es de la mano de algún conocido que lleve ya unos cuantos cientos de horas (creedme si os digo que esto puede llegar a ser poco) en el juego. Adentrarnos sin un guía, se nos antoja complejo en cuanto a la cantidad de cosas que podremos hacer en el título y que el juego no sabe enseñar correctamente a los recién llegados.
Así mismo, la expansión de La Reina Bruja por si mismo, se puede volver un tanto complicada en algunos momentos si no venimos debidamente preparados de las anteriores entregas. Nada que no se solucione con paciencia y un poco de farmeo, pero hay que ir predispuesto a morir en más de una ocasión con algunos de los semibosses o bosses. Igualmente, como con los souls (no llega a esos extremos de dificultad pero es un buen símil), cuando logras derrotar a ese jefe que se te ha atragantado en alguna misión, te invade una sensación de satisfacción acorde a las recompensas que obtendremos del mismo y que nos ayudarán a proseguir con la aventura con unas mínimas garantías.
En resumen: estamos ante un gunplay excelente con un montón de opciones que pueden llegar a ser abrumadoras (aunque no imprescindibles) y con un nivel de dificultad un poco más elevado de lo que podríamos esperar de un Destiny 2, aunque igual o más satisfactorio que las anteriores campañas.
Diversión
Si estáis buscando un juego de acción y disparos en primera persona en Stadia, Destiny 2: La Reina Bruja es sin duda uno de los mejores exponentes del género ahora mismo en la plataforma.
Un gunplay exquisito y una campaña entretenida y con un nivel de dificultad muy ajustado que nos mantendrá pegados a la pantalla hasta completar todas y cada una de las misiones.
Si nos metemos ya en el endgame del juego, podremos despedirnos de nuestra vida social «física» durante un buen tiempo. Incursiones, desafíos, las recompensas…
